Ice cream & cake

Qué locura. Es agosto y estoy prácticamente desnuda por el calor insoportable que hace. ¿El sol? también insoportable. Sobre todo para mí que detesto el sol. Detesto al sol porque no me broncea cuando yo quiero, detesto al sol porque me acalora, detesto al sol porque ilumina demasiado. Y por ese cierto rencor que le tengo al sol me gusta ser blanca, ser casi transparente, me gusta el invierno, me gusta el frío y muchas veces prefiero la oscuridad. No me gusta el verano, hay que estar flaca (nunca estoy tan flaca como quiero), hay que estar bronceada (nunca estoy bronceada, aunque me agrada ser blanca), hay que tener las piernas suaves y sin ningún rastro de vellos (otro sometimiento de la mujer), hay que usar ojotas y sandalias (ODIO mis pies), hay que usar shorts y bikinis (parte superior de mis piernas, te odio), el pelo se pone amarillo y pajoso, uno vive transpirando y con calor, suele bajarme la presión, me molesta estar vestida, se me pegotea la ropa. En fin, el verano puede ser lindo porque hay vacaciones y viajes, uno puede juntarse con sus amigos y pasarla genial, pero viene acompañado de unas cuantas situaciones bastante desagradables y que prefiero evitar.
PUNTO APARTE.
El otro día soñé que tenía cistitis y que iba al baño todo el tiempo. Me extrañó haberme levantado a esa hora tan poco habitual y con ese dolor horrible. Cuando me desperté un poquitín más, me dí cuenta de que me estaba meando, que ese dolor insoportable era mi pobre vejiga y que mi sueño representaba uno de los deseos más anhelados en ese momento.
PUNTO APARTE.
Ayer soñé, pero con otra cosa.
PUNTO APARTE.
Hoy está Pilar City Party 3. Vamos a ver qué tal.