-Sí, ¿por?
-Porque yo lo estoy leyendo y...
-Me pareció re deprimente, pobre tipo...
-Ah, te iba a decir que me sentía re identificada con el chabón...
-Ah........
Bueno, aparentemente soy, según lo denomina Dostoyevski en su libro (extremadamente filosófico), una persona del subsuelo. Imposible de explicar esto sin faltarle el respeto a Fedor, que desarrolla todo un libro para expresar a qué se refiere con un hombre del subsuelo, pero (perdón, capo) básicamente se trata de un introvertido, interesado por la literatura, a quien muchos (tal vez debería decir todos) detestan y quien no sabe actuar en sociedad. Lógico que sea deprimente. Se cuestiona si preferiría ser un hombre idiota, un hombre de acción o seguir siendo del subsuelo. Deduce que los hombres de acción son más felices, que la reflexión angustia y entristece. Y coincido con él en la conclusión: elijo la angustia causada por el hecho de pensar y no ser una persona estúpida que tan sólo actúa.
Ese libro puede ser una patada o un deleite. Depende el ánimo que te toque al leerlo.
ResponderBorrarPero creo, a la larga, termina siendo la propia personalidad de uno la que dicta. Como en tu caso y la conclusión.
Genial el blog.
Saludos.
Nada que ver con nada, pero esa dicotomía me hace acordar (MUUUUUUUUUUUUUUUUUY a lo lejos) a Shutter Island.
ResponderBorrarNunca leí a Dostoyevski, pero lo tengo ahí en la lista de espera.